Halloween se acerca. Una de esas fiestas de las que vivíamos al margen hace solo unos años y que hoy en días es casi un must para niños y adultos.
Para esa noche de espíritus, brujas y muertos vivientes, os traigo algunos consejos que os ayuden a sobrevivir y llegar a noviembre sin perder un ápice de estilo.
A tener en cuenta
1. Escoge bien el disfraz
No es necesario caer en un maxidisfraz tipo sábana por la cabeza ni convertirnos en vampiresas embutidas en látex. En todo el rango intermedio puede haber opciones interesantes.
2. No pierdas tu estilo personal
Si no nos apetece transformarnos en espíritus lúgubres o asesinos sanguinarios, no hay obligación de hacerlo. Seguro que encontramos la opción romántica, rockera, aventurera o de época, que se adapta a nosotros.
3. Tú decides si los dientes negros son imprescindibles
Toda fiesta con disfraces es diversión e ironía y maximiza nuestra capacidad de reirnos de nosotros mismos. Sin embargo, sumar accesorios ‘enfeecedores’, está a nuestro juicio.
4. De inspiraciones también se vive
Si no nos apetece vestirnos de bruja o fantasma, elegir una combinación más cañera de lo habitual puede ser una opción: dale un aire tenebroso a tu look con prendas oscuras, detalles metálicos o encajes negros.
5. Juega con los accesorios
Desde una antifaz insinuante hasta una tela de araña o un sombrero puntiagudo. Así, a pesar de que vayamos vestidos normalmente, haremos un guiño al día.
¿Eres fan de estas fiestas? ¿Cuál será tu disfraz?
Sígueme en Facebook – Twitter – Bloglovin
Deja tu comentario